Comida rápida

En cualquier ciudad existe lo que es la comida rápida ya que es muy rica y ahorra mucho tiempo, a continuación te presentaremos las ventajas y desventajas de este tipo de comida:

Ventajas:

• Debido a que a algunas personas nos gusta cuidar nuestra dieta, no toda la comida rápida es «chatarra», a lo que me refiero es que hoy en día en los famosos restaurantes de «Fast Food» no encontramos únicamente hamburguesas, hot dogs y pizza, ahora podemos encontrar ensaladas de cualquier tipo y otros platos que son cien por ciento vegetarianos y que seguramente nos ayudarán a llevar una dieta saludable.
• Otra de las ventajas es que es ideal para el tiempo, ya que si dispones de poco tiempo para almorzar en tu trabajo o estés donde estés, este tipo de comida te llenará y podrás seguir adelante con tus tareas.
• La mayoría de los establecimientos proporcionan el servicio de comida a domicilio (ideal para los domingos de flojera en los que no quieres hacer nada) que resulta siendo muy cómodo y eficiente.
• El precio es una de sus grandes ventajas, generalmente se ajusta perfectamente al bolsillo de cualquier persona, te llena por muy poco.
• Tienen sabores agradables que nos enloquecen como lo mencionaba anteriormente.
• Cuando terminas no tienes que lavar los platos, solo arrojas la envoltura a la basura y fue.

Desventajas:

• El mayor problema de la comida chatarra, son las numerosas enfermedades cardiovasculares y la obesidad, que se asocian a los altos niveles calóricos que poseen estos «alimentos» si así se les puede llamar.
• Generalmente cuando nos comemos, por ejemplo una hamburguesa, solemos acompañarlas de líquidos, refrescantes sí, pero muy malos para nuestra salud por su alto contenido de azucares y hasta sales que desequilibran completamente nuestro organismo.
• Los pedidos a domicilio, aunque cómodos, no siempre son buenos debido a que las entregas en ocasiones llegan un poco tarde afectando los pocos componentes nutricionales de la comida.
• Superficialmente vemos los componentes básicos, pero en el interior cada comida posee una gran cantidad de conservantes y colorantes que absolutamente son combinaciones muy malas para nuestra salud.
• Son de pésima calidad, es decir, los trozos de carne que se usan para estas comidas son sobrantes de diferentes carnes y que posiblemente llevan mucho tiempo en un congelador; al igual que la parte «saludable» la lechuga, el tomate y las cebollas, seguramente son las que se dañaron durante la cosecha o durante el transporte, las venden a los restaurantes de fast food y así el proveedor no pierde nada, pero los consumidores somos los que perdemos.
• El personal que se contrata no suele estar capacitado para preparar las comidas haciéndolas aún más chatarras, piensa que la persona que preparó tu hot dog ayer, fue al baño y por el afán de entregar las ordenes no se lavó las manos.